lunes, 18 de noviembre de 2013

Miles de ojos esperando la llegada

Malta es una pequeña isla, un punto en el mapa que a no ser por su posición geográfica, que la acerca a todos los que supieron ser grandes imperios, sería insignificante. Pero gracias a estar donde está, a esta isla nunca la dejaron tranquila.

Su capital, La Valeta, se fundó gracias a las Cruzadas: era a donde se llevaban a los caballeros heridos para su recuperación. Fue parte de muchas naciones, tanto que el idioma maltés es una mezcla de inglés, árabe, quién-sabe-qué-más; luego de pasar por diferentes religiones, se definió la católica, por lo que para demostrar esa decisión, colocaron una virgen o un santo en un pedestal en cada esquina.

Siempre fue una isla de guerra, desde la época de las cruzadas hasta la Guerra fría, Malta estuvo involucrada en este o aquel conflicto y no puedo dejar de pensar en eso mientras me acerco a la isla. A lo lejos, desde el mar, se ve un punto color ocre. El barco se acerca, despacio, esperando al piloto y en la entrada a La Valeta, todos los edificios de piedra de ese color tan particular se me antojan a miles de ojos observando cada movimiento de los barcos que se acercan y se alejan del fuerte, las ventanas son agujeros negros que contrastan con el color ocre que reina en la sila. Y mientras más nos acercamos, más observada me sentía.

La Valeta siempre me resultó horriblemente calurosa. Al estar al sur de Italia, tan cerca de Africa, bueno, todo Malta es calurosa, pero más allá de la temperatura ambiente, ese color anaranjado que cubre la ciudad y las calles pequeñas, embotan el aire y hacen que uno se siente preso de la falta de brisa. Por suerte para nosotros, llegamos a otro lugar, donde reinaban los colores y el aire del mar se colaba por todos los callejones.

Cruzamos media isla al sur para llegar a un puerto pesquero donde los botes estaban todos pintados de colores llamativos, donde los edificios eran más blancos que ocres y la costa estaba vestida de cafés. Hermoso paisaje para olvidarse de todos los ojos que me observaron por la mañana.

Malta resultó ser una sorpresa pues esperaba el bochorno de las calles pequeñas de La Valeta, sin embargo, cambió por completo mi visión de la isla. Sí que es una joya del mediterráneo.


Pueden leer el artículo sobre Malta que escribí para la revista Seisgrados de Uruguay pinchando aquí.

5 comentarios:

  1. Si, a mi Malta me encantó. Tomé un tour que alquilas por € 15.00 y ves lo bello que es la isla y sus pequeñas poblaciones y pintorescas costas y sentí que no alcancé a ver todo ya que el tour duró unas 4 ó 5 hrs y ya al ver el mapa solo visité la mitad de la isla. Pero el tour bien valió su costo. Yo volvería a Valeta, no de embalde tengo amigos alemanes viviendo ahi.

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  2. Si, a mi Malta me encantó. Tomé un tour que alquilas por € 15.00 y ves lo bello que es la isla y sus pequeñas poblaciones y pintorescas costas y sentí que no alcancé a ver todo ya que el tour duró unas 4 ó 5 hrs y ya al ver el mapa solo visité la mitad de la isla. Pero el tour bien valió su costo. Yo volvería a Valeta, no de embalde tengo amigos alemanes viviendo ahi.

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  3. Si, a mi Malta me encantó. Tomé un tour que alquilas por € 15.00 y ves lo bello que es la isla y sus pequeñas poblaciones y pintorescas costas y sentí que no alcancé a ver todo ya que el tour duró unas 4 ó 5 hrs y ya al ver el mapa solo visité la mitad de la isla. Pero el tour bien valió su costo. Yo volvería a Valeta, no de embalde tengo amigos alemanes viviendo ahi.

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  4. Si, a mi Malta me encantó. Tomé un tour que alquilas por € 15.00 y ves lo bello que es la isla y sus pequeñas poblaciones y pintorescas costas y sentí que no alcancé a ver todo ya que el tour duró unas 4 ó 5 hrs y ya al ver el mapa solo visité la mitad de la isla. Pero el tour bien valió su costo. Yo volvería a Valeta, no de embalde tengo amigos alemanes viviendo ahi.

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  5. Si, a mi Malta me encantó. Tomé un tour que alquilas por € 15.00 y ves lo bello que es la isla y sus pequeñas poblaciones y pintorescas costas y sentí que no alcancé a ver todo ya que el tour duró unas 4 ó 5 hrs y ya al ver el mapa solo visité la mitad de la isla. Pero el tour bien valió su costo. Yo volvería a Valeta, no de embalde tengo amigos alemanes viviendo ahi.

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